El protector solar adecuado no sólo reduce el riesgo de cáncer de piel, sino que también retrasa el envejecimiento de la piel. Para que un protector solar ayude eficazmente a prevenir el fotoenvejecimiento, debe incluir ingredientes activos que protejan contra los daños ocasionados por los rayos UVA de longitud de onda larga. Pero algunos ingredientes de algunos protectores solares en realidad aceleran el envejecimiento de la piel, ya que generan radicales libres que atacan las estructuras celulares y el ADN, lo que acaba provocando una inflamación crónica.
La mejor protección contra los rayos UVB/UVA se encuentra en las fórmulas que utilizan una combinación de bloqueadores químicos de UVB/UVA. Los dos más recomendados son Helioplex y Mexoryl. El uso de estos filtros solares químicos es la mejor manera, y de hecho la única, de proteger la piel de los daños causados por el envejecimiento de los rayos UVA de longitud de onda más larga.
La avobenzona es el único filtro UVA químico aprobado en los Estados Unidos. Lamentablemente, debido a la forma en que funcionan los absorbentes, es muy inestable. Cuando la molécula de avobenzona absorbe fotones de luz UVA, los electrones se excitan en un estado de energía triplete. Sin estabilizadores, los electrones excitados destruirán la molécula de avobenzona, lo que provocará su rápida degradación, o, en el peor de los casos, pasarán a las bicapas lipídicas de la piel, lo que provocará daños por peroxidación lipídica a través de los radicales libres. Si el octocrileno está presente, estabiliza la avobenzona aceptando la energía «excitada».
¿Cuánta protección UVA proporcionan los protectores solares químicos? Veamos las dos formulaciones más respetadas.
Composición y concentraciones de Helioplex:
- Avobenzona (3%)
- Oxibenzona (6%)
- Octocrileno (2.8%)
- Homosalato (10% en SPF 55 y 15% en SPF 70)
- Octisalato (5%)
En esta formulación, la avobenzona es el absorbente UVA, el octocrileno estabiliza la avobenzona, y la oxibenzona, el homosalato y el octisalato han sido seleccionados como absorbentes UVB. Esta combinación elimina la necesidad de utilizar octinoxato, el filtro UVB más potente. Dado que el octinoxato degrada la avobenzona, esta fórmula se lleva el mérito de haber hecho bien esa parte -no todas lo hacen-. Lo que no quiere decir que sea una gran formulación.
Los principales inconvenientes son:
- la avobenzona sólo protege hasta los 380 nm-el rango UVA es de 400 nm la oxibenzona-este absorbente de UVB genera radicales libres, se asocia con altos índices de dermatitis de contacto y es posiblemente fotocarcinogénico; «se cree que es un factor que contribuye al reciente aumento de casos de melanoma entre los usuarios de protectores solares.»
- El octocrileno: este fotoestabilizador y absorbente de UVB se asocia con riesgos para la reproducción y con altas tasas de alergias cutáneas notificadas.
- Todos los absorbentes químicos de UV se descomponen y generan radicales libres después de cierto tiempo de exposición a los rayos UV, aunque la duración varía. Debe respetarse la regla de cada dos horas. Por cierto, la regla de las dos horas existe, no porque el sudor elimine la protección, sino porque las propiedades fotoprotectoras de todos los compuestos químicos se degradan al exponerse a los rayos UV.
Composición y concentraciones de Mexoryl SX:
- Ecamsule (2%)
- Avobenzona (2%)
- Octocrileno (10%)
En esta formulación ecamsule, un derivado del bencilideno actúa como filtro UVB/UVA. Tiene una aprobación limitada de la FDA para su uso en los Estados Unidos. La ecamsule protege contra las longitudes de onda UV en el rango de 290-400 nanómetros, con una protección máxima a 345 nm. Aunque no se degrada tan rápidamente como la avobenzona, sí se descompone, perdiendo el 40% de sus propiedades protectoras tras un par de horas de exposición. La fotoestabilidad y la cobertura UV mejoran con la avobenzona y el octocrileno.
El mayor problema de esta formulación es la concentración del 10% de octocrileno. Las altas tasas de alergias cutáneas están asociadas con el octocrileno, que ha sido calificado como un «fotoalérgeno emergente».
En esta formulación, el octocrileno cumple una doble función como absorbente de UVB y estabilizador de la avobenzona. No es una buena idea.
La solución:
Utilizar un protector solar sin óxido de zinc. El óxido de zinc es fotoestable, protege en el rango UVA hasta (y mucho más allá) de 400 nm, y es antiinflamatorio.
El FPS 30 en un protector solar sólo de óxido de zinc indica concentraciones de óxido de zinc suficientes para que el metal actúe como un h’eat sink». Esto reduce el efecto de calor en la piel que ayuda a limitar el envejecimiento cutáneo por la vía de la inducción de calor IR.
Los protectores solares tintados con óxidos de hierro protegen contra los daños causados por la luz visible, incluida la hiperpigmentación.
Obtenga una protección adicional contra los rayos UVA gracias a los aceites de la familia de los carotenoides. Este estudio demuestra que ayudan a prevenir las arrugas inducidas por los rayos UVA.
Perspectiva de un formulador
Se puede ver donde la búsqueda del protector solar perfecto presenta muchos obstáculos de confusión. Hasta ahora, el óxido de zinc es el único agente de protección solar aprobado por la FDA con el que me siento totalmente cómodo. Aunque el dióxido de titanio protege mejor contra las longitudes de onda UVB más cortas que el óxido de zinc, esto se debe a que en ese rango actúa como un absorbente en lugar de un reflector, mostrando así todos los problemas de transferencias de energía que crean radicales libres que se encuentran en los protectores solares químicos. Estoy de acuerdo con organizaciones como el EWG y los investigadores del Dr. Niels Jorgenson, que desaconsejan el uso de protectores solares químicos, y añado mi propia nota de precaución con respecto al uso del dióxido de titanio. En mi opinión, el TiO2 es principalmente un absorbente, y como tal causa problemas de envejecimiento de la piel que probablemente preferiríamos evitar.
Esto nos deja el óxido de zinc, y aunque el óxido de zinc es un ingrediente excelente que hace que el trabajo de los consumidores de evitar los protectores solares químicos sea mucho más fácil, la búsqueda del protector solar perfecto continúa.
Lo que hay que saber:
Un protector solar con FPS 30, sin óxido de zinc y teñido con óxidos de hierro, sigue siendo la mejor opción disponible cuando se trata de limitar el fotodaño y el fotoenvejecimiento. Añade carotenoides para una protección UVA adicional y estarás listo para un día de juego veraniego.