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Los huevos de gallina tienen el mismo aspecto estén o no fecundados. David Silverman/Getty Images

Los humanos llevamos comiendo huevos desde antes de ser «modernos». Es difícil cazar un pájaro o un ciervo, pero si puedes subirte a un árbol, puedes recoger unos cuantos huevos para cenar. A veces, sin embargo, puedes apostar que nuestros antiguos ancestros abrían el huevo para encontrar algo más que una yema amarilla rodeada de albúmina clara y gelatinosa: podrían haber encontrado un pequeño embrión de ave. Todo forma parte de la creación de las crías de pájaros. Entonces, ¿por qué los huevos del supermercado nunca le sorprenden con una cría de pájaro en la sartén por la mañana?

La gran noticia aquí es que las gallinas hembras ponen huevos -por lo general uno cada día, más o menos- independientemente de si se han apareado con un gallo. En la producción industrial de huevos, no hay gallos – de hecho, los productores industriales de huevos matan inmediatamente a cualquier cría de gallo nada más nacer. Es una práctica brutal -y costosa, ya que ejecutar a la mitad de los polluelos que nacen no es especialmente eficiente-, pero una nueva tecnología podría permitir pronto a las granjas de pollos identificar el sexo del polluelo dentro del huevo a los pocos días de su puesta. La cuestión es que, si adquieres huevos en un supermercado, es muy probable que no hayan sido fecundados.

Pero si hay un gallo cerca, es muy probable que el huevo que te estás desayunando se haya convertido un día en una cría de pollo si le hubieras dado un poco de tiempo (aunque el embrión deja de desarrollarse una vez que se mete en la nevera). Si quieres saber si tu huevo ha sido fecundado, rómpelo y busca el blastodermo: una mancha blanca en la yema, o incluso manchas de sangre. Los criadores de huevos incluso «velan» los huevos, lo que implica sostenerlos frente a una luz brillante (o una vela) en una habitación oscura. Los huevos fecundados tendrán manchas oscuras en ellos, o podrían ser completamente opacos, dependiendo de la etapa de desarrollo del pollito.

Está perfectamente bien comer un huevo fecundado – de hecho, algunas dietas de moda y compañías de huevos especializados promueven los huevos fértiles como más saludables, pero hasta ahora nadie ha podido respaldar estas afirmaciones con evidencia científica.

Publicado originalmente: 7 de diciembre de 2018