Cuando se trata de gestionar a sus empleados, una de las cosas más importantes que puede hacer por ellos implica establecer el tono adecuado en el trabajo. Todos hemos escuchado algunas de las historias de horror sobre trabajos terribles o malos gerentes, y la única cosa que cada una de estas historias tiene en común fue el ambiente negativo del lugar de trabajo.

La motivación de un empleado para trabajar está fuertemente influenciada por su ambiente. Usted quiere que sus empleados le respeten, no que le teman. La creación de un ambiente de trabajo positivo producirá resultados mucho mejores para sus empleados y su empresa.

Comunicación clara

Una buena comunicación entre un jefe y sus empleados es esencial para una relación laboral positiva. Sus empleados necesitan entender lo que usted quiere que logren, pero usted también necesita tener una idea de lo que ellos esperan de usted. Debe haber la misma cantidad de comunicación por parte de usted y de sus empleados.

La clave de una buena comunicación en el trabajo es ser claro y directo. Si hay problemas, no los evite y haga como si no existieran. Abórdalos de frente y deje claro por qué es un problema. Especialmente si llevas malas noticias, es mucho mejor ser directo con tus palabras.

Escucha las ideas de todos

Cada uno de tus empleados está en tu empresa por una razón. Anime a los empleados a expresar sus ideas. Incluso si la idea puede necesitar algo de trabajo, sigue siendo importante que todos den su opinión. Esto demostrará que cada miembro de su equipo es valioso y que su aportación es tan importante como la de un compañero de trabajo.

Anime a sus empleados a compartir sus ideas.

Establezca momentos específicos durante el día para abrir la puerta de su oficina y permitir que los empleados le transmitan sus ideas. Anime a los miembros de su equipo, especialmente a los empleados más silenciosos, pidiéndoles su opinión directamente; eso ayudará a consolidar el hecho de que la opinión de todos es importante. En Swartz Kitchens & Bath, se anima a los empleados a compartir consejos de diseño en sus reuniones semanales. Esto les permite aprender unos de otros y también les ayuda a estar atentos a más ideas para compartir con el equipo.

Reconozca el trabajo duro

Es una buena idea recompensar a un empleado que hace un buen trabajo. Reconocer a los individuos que trabajan duro les animará a seguir con el gran trabajo. También inculca la noción de que el trabajo duro es reconocido y apreciado, y anima a otros empleados a esforzarse por obtener el mismo reconocimiento.

Las reuniones de personal son un gran momento para reconocer el trabajo que hacen sus empleados. Puede dedicar dos minutos de sus reuniones a destacar los logros de sus empleados. Otras recompensas que son rentables pueden consistir en permitir a sus empleados que trabajan duro salir del trabajo antes o entrar más tarde, o darles un premio como una tarjeta de regalo.

La empresa de marketing en Internet WebpageFX tiene un «programa de aprendizaje continuo» que recompensa a los empleados por pasar tiempo fuera del trabajo leyendo libros relacionados con el sector, aprendiendo código o asistiendo a seminarios. Algunos de los incentivos creativos que ofrecen incluyen entradas para jugar al láser, suscripciones a Netflix y, si te esfuerzas durante varios años, podrías incluso ganarte un safari a África.

Muestra tu confianza

¿Conoces a esos padres que se ciernen sobre sus hijos constantemente y nunca les dan tiempo para respirar? No quieres ser el equivalente a eso en el trabajo. Puede que tu instinto sea microgestionar y asegurarte de que todo funciona exactamente como tú quieres, pero eso sólo creará un ambiente negativo para todos los demás en la oficina. Una vez tuve un jefe que leía todos los correos electrónicos que alguien enviaba en toda la empresa. Yo enviaba a un compañero de trabajo un correo electrónico privado preguntándole por los detalles de un proyecto, y el jefe le respondía con su opinión. Todo el mundo se sentía vigilado y la moral se resentía.

Dé un paso atrás y deje que sus empleados hagan su trabajo. Tiene que confiar en que harán un buen trabajo; después de todo, los contrató por una razón. Si bien debe controlar periódicamente a sus empleados, no debe ser autoritario al respecto.

Diviértase un poco

Sus empleados pasan ocho horas de su día en la oficina. Mantener un ambiente profesional es importante, pero eso no significa que tenga que ser aburrido. Un empleado más feliz rendirá mucho más que uno miserable.

Hay muchas maneras de ser divertido y profesional a la vez. Permita que sus empleados decoren sus espacios de trabajo para mostrar su personalidad; incluso organice pequeños concursos para el escritorio mejor decorado. Anime a los empleados a tomar descansos durante el día y estarán más contentos y serán más productivos. Un retiro del personal puede hacer maravillas para la moral, siempre que sea un retiro divertido y productivo.

Lidera el camino

Como responsable, eres el que marca el tono para tus empleados. Si eres malhumorado y negativo, tus empleados reaccionarán en consecuencia. Si se mantiene positivo, su entorno de trabajo lo reflejará. Una sonrisa es contagiosa, y un ceño fruncido aún más.

Siéntase cómodo y anímese con sus empleados. Escúchelos y mantenga una comunicación constante. Una vez que cree el ambiente de trabajo positivo, mantenerlo será mucho más fácil.

¿Qué ha hecho usted para hacer de su lugar de trabajo un ambiente más positivo? Cuáles son algunas de las cosas que has experimentado y que han hecho que un ambiente de trabajo sea positivo o negativo? Cuéntanoslo en Twitter @bplans.