El oro, un metal atractivo y muy valorado, se conoce desde hace al menos 5500 años. El oro se encuentra a veces libre en la naturaleza, pero normalmente se encuentra junto con la plata, el cuarzo (SiO2), la calcita (CaCO3), el plomo, el telurio, el zinc o el cobre. Hay aproximadamente un miligramo de oro disuelto en cada tonelada de agua de mar, aunque su extracción cuesta actualmente más de lo que vale el oro. Se ha calculado que todo el oro que se ha refinado en la actualidad podría colocarse en un cubo de 20 metros de lado.
El oro es el más maleable y dúctil de todos los metales conocidos. Una sola onza de oro puede convertirse en una lámina de unos 5 metros de lado. Las finas láminas de oro, conocidas como pan de oro, se utilizan principalmente en el arte y la artesanía para dorar. Una hoja de oro puede ser tan fina como 0,000127 milímetros, es decir, unas 400 veces más fina que un cabello humano.
El oro puro es blando y suele alearse con otros metales, como la plata, el cobre, el platino o el paladio, para aumentar su resistencia. Las aleaciones de oro se utilizan para fabricar joyas, artículos de decoración, empastes dentales y monedas. La cantidad de oro en una aleación se mide con una unidad llamada quilate. Un quilate equivale a una parte entre veinticuatro, por lo que un anillo de oro de 18 quilates contiene 18 partes de oro puro y 6 partes de material de aleación.
El oro es un buen conductor del calor y la electricidad y no se empaña cuando se expone al aire, por lo que puede utilizarse para fabricar conectores eléctricos y placas de circuitos impresos. El oro también es un buen reflector de la radiación infrarroja y puede utilizarse para proteger las naves espaciales y los rascacielos del calor del sol. Los espejos recubiertos de oro pueden utilizarse para fabricar telescopios sensibles a la luz infrarroja.
Un isótopo radiactivo del oro, el oro-198, se utiliza para tratar el cáncer. El tiosulfato sódico de oro (AuNa3O6S4) se utiliza como tratamiento para la artritis. El ácido clorúrico (HAuCl4) se utiliza para conservar las fotografías sustituyendo los átomos de plata presentes en una imagen.