El resumen de INSIDER:
- Calentar los huevos elimina algunos de los elementos nutritivos de la yema.
- Comer huevos crudos es, en realidad, lo más nutritivo, aunque puede provocar salmonela.
- Los huevos fritos son los que más calor requieren, así que añada aceite de coco para sustituir parte de la grasa saludable.
Los huevos tienen infinitas posibilidades. Han sido nuestros fiables compañeros de comida que siempre nos han cubierto las espaldas. No sólo son baratos, fácilmente accesibles y deliciosos, sino que son un alimento básico para el desayuno y la merienda perfecta.
Pero, ¿existe una forma óptima de cocinar un huevo? Para todos mis compañeros entusiastas de los huevos, es posible que hayan estado consumiendo y cocinando estos deliciosos pequeños de maneras que les roban todo su valor nutricional.
Por suerte, he clasificado las formas más comunes de preparar los huevos en orden de valor nutricional de cada preparación. La próxima vez que vayas a coger un huevo, ten en cuenta estos consejos.
Crudos
Calentar un huevo puede eliminar los elementos nutritivos que se encuentran en la yema, así que si puedes ser un hombre y consumir un huevo crudo, mejor para ti. Eso sí, ten cuidado con la salmonela, que podría provocar una intoxicación alimentaria.
Cocinados
Cocinarlos contiene menos grasa y menos calorías que freírlos u hornearlos, ya que requiere menos calor y aceites añadidos. Si buscas tener clase y estar sano, este es el camino a seguir.
Hervido
No sólo es hervir una de las formas más rápidas y sencillas de preparar un huevo, sino que es una de las más saludables. Hervir un huevo mantiene la yema intacta, conteniendo todos los nutrientes en un lugar estable.
Revuelto
Para ahorrarte unas cuantas calorías, utiliza agua en lugar de leche. De este modo, tu revuelto contiene la misma grasa, colesterol y calorías que un huevo cocido. Si quieres reducir aún más las calorías, separa la yema y utiliza sólo la clara.
Fritos
Freír un huevo es lo que más calor requiere, lo que afecta a la composición química del valor nutricional potencial del huevo. Para combatir este problema, utiliza una sartén antiadherente, o considera el uso de aceite de coco si quieres añadir una dosis de grasas saludables.
Está claro que la jerarquía en la preparación de los huevos es real. Si busca disfrutar del sabor de un huevo, pero también desea eliminar las calorías no deseadas, podría ser el momento de revolver su rutina.