Para muchos aficionados al prog-rock, el 15 de agosto de 1975 fue el día en que murió Genesis. En esa fecha, tras semanas de especulación, la banda anunció que Peter Gabriel había abandonado sus filas.

Según un portavoz de la compañía discográfica, Gabriel quería explorar «otros intereses literarios y experimentales fuera de la música.» Sin embargo, en una declaración posterior a la prensa musical británica titulada «Out, Angels Out», Gabriel explicó que estaba desilusionado con la industria musical.

Esa desilusión no duró mucho. En 1977, lanzó su primer álbum homónimo con el beneplácito de la crítica; el lanzamiento de una exitosa carrera en solitario que continúa hasta hoy.

Genesis también se recuperó. Aunque la prensa musical asumió que la marcha de Gabriel era la sentencia de muerte para el grupo, ellos tenían otras ideas. Como dijo un publicista a Rock Scene en su momento, «los chicos están en estos momentos buscando un nuevo cantante para sustituir a Gabriel y, de hecho, ya tienen una idea muy en mente.»

Esa idea, según se supo más tarde, era promover al baterista Phil Collins al papel de frontman. En un principio, Collins no había querido tomar el relevo de forma permanente y, cuando la banda entró en el estudio para grabar su primer disco post-Gabriel, el plan de Collins era escribir las partes vocales y luego enseñárselas a un nuevo cantante. Pero, después de que la búsqueda de la banda para encontrar un candidato adecuado fracasara, y de que la reticente actuación de Collins en el estudio del tema ‘Squonk’ impresionara a sus compañeros de banda, se tomó la decisión.

El álbum resultante, «A Trick of the Tail» de 1976, fue un éxito comercial y de crítica y elevó el perfil de la banda en Estados Unidos.

«Trick…» y su continuación, «Wind & Wuthering» de 1977, continuaron con la tendencia proggy de los años Gabriel de Genesis. Pero, con la salida del guitarrista Steve Hackett y el lanzamiento de «… And Then There Were Three…» en 1978, el sonido de la banda se transformó drásticamente. Respondiendo a la duración corta y concisa de las canciones de los movimientos punk y new wave, «…And Then There Were Three…» carecía de épicas de diez minutos o suites de canciones que llenaban una cara del vinilo.

En declaraciones a Melody Maker en 1978, Collins sostuvo que Genesis no se esforzaba por ser una «banda de singles» y que, a pesar de su corta duración, su material seguía siendo «fundamentalmente el mismo». Pero muchos de los que escucharon el single principal del disco, «Follow You Follow Me», se apresuraron a discrepar. Era más lento, más sentimental y más descaradamente comercial que todo lo que había producido Genesis. Y de forma deliberada: la canción fue escrita conscientemente para ampliar la base de fans de la banda.

Funcionó.

Big Time.

«Follow You Follow Me» se convirtió en el primer éxito pop mundial de Genesis. Más que eso, definió el enfoque de la banda para la siguiente década. Cuando los años 70 se convirtieron en los 80, los Genesis dirigidos por Collins redoblaron los éxitos del pop-rock. Como resultado, discos como «Duke» (1980), «Abacab» (1981) e «Invisible Touch» se convirtieron en multiplatino y llevaron al grupo al megaestrellato.

Pero, a medida que Genesis se convertía en un pilar del pop-rock que llenaba estadios, crecían las voces de disconformidad de los fans que apreciaban su material progresivo. Las acusaciones de que Genesis había abandonado sus raíces o, como dijo J. D. Considine de Rolling Stone, que se habían convertido en «pesos ligeros fáciles de escuchar» sonaron más fuerte a medida que avanzaba la década.

En poco tiempo, hubo un cisma en la base de fans de la banda. Como señaló el crítico de rock Colin Maguire, por un lado estaban los detractores de Collins que afirmaban que «se vendieron y se volvieron demasiado corporativos cuando Collins entró en escena». Por otro lado estaban los que argumentaban que «los años de Gabriel eran aburridos y difíciles de digerir»

Hoy en día, esas facciones permanecen. Como dijo Ultimate Classic Rock, «hay pocos grupos en el canon del rock clásico con una discografía más divisiva que la de Genesis… buena suerte encontrando a alguien por ahí que esté igualmente enamorado de ambos lados de la historia de la banda.»

En ese sentido, Genesis es un caso extraño en la historia del rock. Pon a dos fans acérrimos de Genesis en una habitación juntos y es totalmente posible que no coincidan en nada. Es casi como si fueran fans de una banda diferente.

¿Pero qué hacéis vosotros, los fieles de Thalia, de todo esto? ¿Cuál es vuestra posición en el debate Gabriel vs. Collins? ¿Estáis comprometidos con las raíces prog de Genesis? ¿Defiendes su producción más comercial de los 80? ¿O formas parte de la rara raza que mantiene ambos lados de la banda en igual medida?

¡Haznos saber tus pensamientos a continuación, y comparte tus recuerdos de Genesis con nosotros!