La historia de Kingsville está estrechamente entrelazada con el arroyo principal de la ciudad, el Santa Gertrudis. Los primeros habitantes de la zona de los que se tiene constancia fueron los Malaquitas coahuiltecos, que sobrevivían gracias a los mariscos de la cercana Bahía de Baffin, con asentamientos a lo largo de los arroyos Santa Getrudis y San Fernando, y el brazo Cayo del Grullo de la Bahía de Baffin. Grandes manadas de mustangs recorrían las llanuras del sur de Texas, a menudo bebiendo de las aguas de los arroyos alimentados por manantiales en la actual Kingsville y sus alrededores. En 1803, José Lorenzo de la Garza estableció un asentamiento a lo largo del Santa Gertrudis. En 1846, el general Zachary Taylor y su ejército acamparon a orillas del Santa Gertrudis antes de su campaña en México. En 1899, después de muchos intentos fallidos, el administrador del rancho King, Robert J. Kleberg, Jr., pudo por fin aprovechar un lago subterráneo de agua. El descubrimiento de agua de fácil acceso allanó el camino para un futuro asentamiento junto al rancho.
Siglo XXEditar
Con el continuo crecimiento del King Ranch a mediados y finales del siglo XIX, aumentó el deseo de un ferrocarril a través de la región, tanto para conectar las comunidades del Valle del Río Grande con el resto de Texas, como para servir al King Ranch. A principios del siglo XX, Henrietta King, viuda de Richard King, cedió una parte del rancho para atraer la construcción de una ciudad y llevar un ferrocarril adyacente al rancho. Robert J. Kleberg, Jr. formó la Kleberg Town and Improvement Company en 1903, encargada de planificar y construir la ciudad, en el legado de su suegra, Henrietta. En 1904, la comunidad se planificó a tres millas de la sede del King Ranch y fue nombrada en honor al fundador del King Ranch, Richard King. La comunidad también albergaría la sede del recién creado Ferrocarril de San Luis, Brownsville y México, un acuerdo al que se llegó con el magnate del ferrocarril Benjamin Yoakum. Se construyeron los primeros edificios, se tendió la vía a través de la ciudad y el primer tren pasó por Kingsville el 4 de julio de 1904, considerada la fecha de fundación de la ciudad. La primera oficina de correos de Kingsville también se estableció ese año.
A finales de la primera década del siglo XX, Kingsville ya tenía un próspero panorama comercial, con un activo club comercial, que fue el precursor de la actual cámara de comercio de la ciudad. En 1909 se creó una biblioteca, en 1910 se construyó un teatro de la ópera, y en 1911 se incorporó la ciudad y se constituyó el primer gobierno municipal. Dos años después, en 1913, Kingsville fue nombrada sede del condado de Kleberg. Alrededor de 1920, se descubrió petróleo y gas natural cerca de Kingsville, lo que provocó el primer boom demográfico de la ciudad.
Las políticas segregacionistas y las leyes de Jim Crow estuvieron presentes en Kingsville durante el comienzo del siglo XX. Para la década de 1920, habían surgido tres comunidades segregadas distintas, la comunidad tejana de habla hispana y la comunidad mexicana migrante de trabajadores agrícolas al norte, la comunidad afroamericana que trabajaba principalmente en el ferrocarril al sur, y la comunidad angloamericana en el centro de la ciudad a lo largo de la región del centro. La práctica habitual en las ciudades controladas por los angloamericanos en el sur de Texas, a principios del siglo XX, era crear barrios segregados, lo que se evidencia en la planificación de escuelas e iglesias separadas para las tres comunidades segregadas. El Ku Klux Klan tuvo presencia en la ciudad, impulsando a un alcalde a la elección en 1922, y fue responsable del linchamiento de un médico afroamericano visitante de la cercana Bishop en 1923.
En 1925, se inauguró la Escuela de Maestros del Sur de Texas, una de las únicas seis escuelas normales en todo el estado de Texas en ese momento, y la única al sur de College Station, Texas. El esfuerzo por abrir la escuela, liderado por el heredero de King Ranch, Caesar Kleberg, y el club comercial de la ciudad, se había retrasado debido a consideraciones políticas en la legislatura estatal, y a problemas de financiación derivados de la Primera Guerra Mundial. Más tarde, en 1929, cambió su nombre por el de Texas College of Arts and Industries (Texas A&I), y luego por el de Texas A&I University en 1967, y pasó a adoptar su nombre actual, Texas A&M University-Kingsville en 1993, después de unirse al Texas A&M University System en 1989. Además de ofrecer una amplia gama de títulos de grado y postgrado, la universidad es la sede del Centro Nacional de Investigación de Toxinas Naturales, el Instituto de Investigación de la Vida Silvestre Caesar Kleberg, y el Colegio de Farmacia Irma Lerma Rangel, el programa de doctorado de farmacia para el sistema de la Universidad de Texas A&M.
Durante la preparación de la defensa nacional para la Segunda Guerra Mundial, los líderes cívicos locales y el congresista Richard Kleberg, otro heredero del King Ranch, presionaron al Departamento de Guerra para que eligiera Kingsville y otras comunidades del sur de Texas como futuro emplazamiento de un aeródromo militar. En 1941 se inauguró una estación aeronaval en la cercana Corpus Christi, tras las gestiones del congresista Kleberg, y se empezó a entrenar a pilotos para la Marina y el Cuerpo de Marines. Tras Pearl Harbor y la entrada de Estados Unidos en la guerra, la necesidad de aumentar el entrenamiento de pilotos y de contar con más aeródromos auxiliares llevó a la Marina a elegir Kingsville como sede de uno, entre otros municipios. Los planes se elaboraron en 1941 y, en 1942, la Marina estadounidense inauguró el nuevo aeródromo de entrenamiento, Naval Air Auxiliary Station Kingsville, justo al este de la ciudad. Después de la Segunda Guerra Mundial, el campo se puso en estado de «mothball», pero se reabrió poco después, en 1951, y ha estado en funcionamiento de forma continua desde entonces. NAS Kingsville es una de las tres principales instalaciones de entrenamiento de aviones de la Marina, y ha tenido un impacto significativo en la economía y la historia de Kingsville.
Varias industrias importantes han llamado a Kingsville su hogar a lo largo de la historia de la ciudad. En 1944, la Corporación Celanese abrió una planta al norte de Kingsville que todavía está en funcionamiento. A principios de la década de 1960, Humble Oil and Refining Company, ahora conocida como Exxon, trasladó una oficina de distrito a Kingsville debido a la proximidad de la ciudad a los campos petrolíferos cercanos. La población de Kingsville aumentó de forma constante, alcanzando un máximo de algo menos de 30.000 habitantes a mediados de la década de 1980. Desde entonces, la ciudad ha experimentado una leve recesión económica, con el cierre de la oficina de distrito de Exxon, la disminución de la matrícula en la universidad y el menor impacto económico de la industria petrolera, todos ellos citados como factores para el declive de la ciudad.