¿Los arándanos son realmente bayas?

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Los arándanos son una de las principales frutas comerciales nativas de Norteamérica. Son muy populares durante las fiestas, pero ¿son realmente bayas?

La respuesta corta:

No, los arándanos no son bayas.

La respuesta larga:

Se pueden asar, salsear, hacer zumo y destacar en las comidas de Acción de Gracias y Navidad. Pero lo que muchos creen que es una de las bayas más comunes en la dieta navideña estadounidense no es una baya en absoluto.

Tanto los arándanos como su primo cercano el arándano no son realmente bayas. Más bien, están clasificados como epígonos, un tipo de fruta comúnmente llamada falsa baya. ¿Por qué son falsas? Científicamente, una baya se produce a partir del ovario fecundado de una flor. Sin embargo, los arándanos crecen debajo de la parte florida de su planta. Mientras que las bayas normales brotan de su flor y la sustituyen en la vid, un arándano rojo madura junto a la flor.

Muchos frutos confían la dispersión de sus semillas a animales hambrientos, pero los arándanos rojos dependen del agua para su dispersión. En contra de la creencia popular, los arándanos rojos no crecen en el agua. La planta del arándano rojo suele echar sus raíces a lo largo de la orilla de una masa de agua, prosperando en un suelo rico en turba, arcilla, arena y roca.

Las vides del arándano rojo crecen sobre el agua y, una vez que han madurado lo suficiente, los frutos se desprenden. A continuación, son arrastrados por la superficie del agua hasta lechos lejanos, donde las semillas pueden, a su vez, convertirse en más plantas de arándanos. Los arándanos son increíblemente flotantes en comparación con otras frutas, gracias a una serie de pequeñas bolsas de aire situadas en su núcleo. Esto les permite flotar fácilmente en la superficie del agua, como pequeñas boyas.

Los arándanos obtienen su acidez debido a su evolución hacia la dispersión en el agua. Los arándanos, en cambio, son más dulces, porque evolucionaron para producir azúcar con el fin de atraer a los animales para que comieran sus frutos y esparcieran sus semillas.

Entonces, ¿cómo se asociaron los arándanos con el Día de Acción de Gracias?

Los nativos americanos tenían una historia de uso de los arándanos silvestres. Para ellos, era algo más que un alimento. Lo utilizaban para teñir telas, conservar la carne de los animales y tratar las heridas. Según la leyenda popular, los nativos americanos ayudaron a los primeros colonos europeos a superar algunos de los duros inviernos mostrándoles cómo utilizar los arándanos rojos.

Son muchos los que creen que su inclusión en el primer Día de Acción de Gracias pudo deberse a esta conexión.

El cultivo de los arándanos rojos también evolucionó con los años. Mientras que antes se recogían minuciosamente a mano, los agricultores acabaron dándose cuenta de que si inundan los pantanos donde crecen los arándanos, la fruta flotará y podrán sacarla de la superficie. Este desarrollo ayudó a llevar el cultivo de arándanos a la era moderna.

¿Cuál es su uso favorito de los arándanos? ¿Salsa? ¿Zumo? ¿Una guarnición? ¿Lo ha probado alguna vez en un sándwich de sobras de Acción de Gracias? (Pruébalo este año y no te arrepentirás)

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