Todos los datos de Banting/Keto que necesitas
Datos de la Dieta Banting
William Banting era un empresario de pompas fúnebres británico que era muy obeso y quería perder peso desesperadamente. En el año 1862 visitó a su médico, William Harvey, quien le propuso un plan de alimentación radical con alto contenido en grasas pero que incluía muy pocos carbohidratos. Al seguir este plan de alimentación, Banting experimentó una pérdida de peso tan notable que escribió una carta abierta al público, la «Carta sobre la corpulencia», que se difundió ampliamente. A medida que más personas empezaron a seguir este plan de alimentación para perder peso, el término «banting» o «bant» se popularizó.
¿Qué estamos diseñados para comer?
Banting simplemente descubrió lo que los seres humanos estaban diseñados para comer: lo que los primeros humanos comían hace 200.000 años. Respetados biólogos, genetistas, paleoantropólogos y teóricos creen que los genes humanos apenas han cambiado desde que el ser humano comenzó su andadura en la tierra. Si se pudiera resumir toda la historia de la humanidad en un día, sólo hemos estado comiendo cereales y granos durante cinco minutos y azúcar durante cinco segundos, un periodo de tiempo muy corto en nuestra existencia. Tras el éxito experimentado por William Banting con este plan de alimentación bajo en carbohidratos y alto en grasas, la dieta «banting» se convirtió en el tratamiento estándar para la pérdida de peso en las principales facultades de medicina europeas y norteamericanas. Pero en 1959 fue excluida de todos los principales libros de texto de medicina y nutrición.
Las desastrosas directrices dietéticas
En 1977, el gobierno estadounidense publicó las Metas dietéticas para los Estados Unidos, un conjunto de directrices que abogaban por una dieta alta en carbohidratos y baja en grasas, exactamente lo contrario de la dieta que hemos estado siguiendo durante gran parte de nuestra existencia. Se decretó que debíamos comer de seis a once raciones de cereales al día y que el azúcar estaba absolutamente bien para añadirlo a todo. Esta dieta se adoptó posteriormente en la mayor parte del mundo occidental y una plétora de productos alimenticios bajos en grasa llegó a las estanterías. Esto ha tenido un efecto desastroso en nuestra salud. Desde principios de los años 80, la incidencia de la obesidad y la diabetes ha aumentado rápidamente. ¿Podemos llamar a esto una coincidencia?
La idea errónea común
Hay una idea errónea común de que comer grasa, especialmente grasa saturada, es malo para usted y que es una causa principal de la presión arterial alta, enfermedades del corazón y la obesidad. Esto no es cierto y se basa en un estudio erróneo realizado por Ancel Keys en 1953. La verdad es que una dieta rica en hidratos de carbono, especialmente los refinados y el azúcar, es la causa de la obesidad, la diabetes y otras enfermedades crónicas. Los aceites vegetales (de semillas) y sus derivados, como la margarina, también son un factor que contribuye a las enfermedades del corazón, aunque los fabricantes nos digan exactamente lo contrario.