Los piercings se han hecho muy populares en los últimos años pero los dentistas han advertido al público de los peligros de los piercings en la lengua. Todos los piercings conllevan un riesgo de infección porque se hace una incisión en el tejido y las bacterias tienden a acumularse alrededor de las tachuelas y los pendientes.

¿Qué tipo de daño pueden hacer los piercings?

Los piercings en la lengua pueden hacer mucho daño en la boca. El contacto constante entre el metal y los tejidos y estructuras de la boca puede causar daños, como astillas y dolor de dientes.

Los piercings en la lengua también aumentan el riesgo de infección en la boca. Según los dentistas, la boca es propensa a las infecciones y una gran proporción de las personas que se hacen un piercing en la lengua acaban sufriendo algún tipo de infección. Los piercings en la lengua dificultan la limpieza adecuada de la boca y tienden a atraer la placa y las bacterias. En algunos casos extremos, la infección puede ser tan grave que la lengua se hincha y bloquea las vías respiratorias, lo que puede poner en peligro la vida.

Los piercings en la lengua también pueden dañar los nervios, lo que puede afectar al sentido del gusto y a la capacidad de detectar la temperatura. Esto significa que las personas pueden quemarse al comer o beber alimentos o líquidos muy calientes porque no pueden determinar la temperatura.

Consejos para las personas con piercings

Los dentistas y las organizaciones dentales recomiendan encarecidamente a las personas que no se hagan piercings en la lengua, pero si tienes un piercing en la lengua, es muy importante que mantengas el piercing lo más limpio posible y mantengas una buena higiene bucal. Los piercings son focos de infección, por lo que es esencial mantener esa zona lo más limpia posible. Si notas síntomas como hinchazón, cambio de color de la lengua, sangrado o dolor, acude a tu médico o dentista lo antes posible.