Foto de Mel’s Drive-In San Francisco, California, alrededor de 1953.

La moda de los autocines comenzó en 1921 con Kirby’s Pig Stand en Dallas, Texas. A medida que aumentaba la posesión de automóviles, también lo hacía la popularidad de los autocines y, en 1947, el primer autocine llegó a San Francisco, California. Mel Weiss y Harold Dobbs abrieron el primer Mel’s Drive-In en el 140 de South Van Ness Avenue. El clima cálido de California lo convertía en el lugar perfecto para abrir un restaurante en el que los clientes eran atendidos en sus coches por los camareros. El aparcamiento original tenía capacidad para 110 coches y un comedor con capacidad para 75 clientes.

La comida era entregada en bandejas en las ventanillas de los coches por los carhops en el Mel’s Drive-In.

El Mel’s Drive-In original.

El nuevo Mel’s tuvo tanto éxito que los costes de construcción y puesta en marcha se recuperaron en el primer mes. La descripción en melsdrive-in.com pinta una imagen del paraíso de las hamburguesas de mediados de siglo:

» … el interior era el típico estilo de cafetería con mucha fórmica, cromo y cómodos asientos de cabina. En el centro de la planta principal, una hilera de taburetes se enfrentaba a un mostrador circular que rodeaba dos fuentes de soda completas y una batería de cajas para tartas y urnas de café. La cocina original tenía la capacidad de producir 180 hamburguesas por minuto. Un gran equipo de cocineros, ayudantes de camarero y camareros elegantemente uniformados mantenían la comida en movimiento y a los clientes contentos»

Debido a su popularidad, se abrieron otros Mel’s Drive-Ins en las zonas de Sacremento y San Francisco. Este, el segundo en abrirse, estaba situado en San Francisco.

Mel’s Drive-In Restaurant situado en San José, California.

El éxito del primer restaurante animó a Weiss y Dobbs a construir varios otros restaurantes que finalmente se extendieron por todo el norte de California e incluyeron locales en San Francisco, Oakland, Berkeley, Sacramento, San José, Walnut Creek y Salinas.

Filmación en Mel’s Drive-In para «American Graffiti».

En 1972 la franquicia de Mel’s fue vendida a la cadena de restaurantes Foster’s. Poco después, el local original de Mel’s fue elegido por George Lucas como lugar de rodaje de su película «American Graffiti», estrenada al año siguiente.

Los Drive-Ins de Mel’s siguen abiertos hoy en día, aunque no son propiedad de la familia original.

Incapaz de competir con las cadenas de comida rápida, Foster’s tuvo que declararse en quiebra y Mel’s fue vendido de nuevo. Varios años después, el local original de Mel’s cerró y fue derribado. El famoso nombre, sin embargo, ha seguido existiendo como Mel’s Next Generation y todavía hay autocines y restaurantes Mel’s en California.

El autocine original de Mel’s sigue formando parte de la cultura de los coches de carreras hoy en día, gracias a su aparición en la película de George Lucas, «American Graffiti».