Contexto de Nar-Anon

Nar-Anon fue fundada en 1968 por Robert Stewart Goodrich y ofrece un programa de 12 pasos para las personas cuyas vidas se han visto afectadas por la adicción a los narcóticos de otra persona. Al igual que Al-Anon y Alcohólicos Anónimos, está separado de Narcóticos Anónimos, pero opera con ellos en mente para coincidir con sus objetivos. Con más de 24 millones de estadounidenses que han consumido drogas ilícitas en el último mes, se trata de un problema enorme que afecta a cónyuges, hijos, padres, hermanos, familia extensa y más.

¿Qué drogas se consumen?

El Departamento de Justicia de EE.UU. separa las drogas de consumo habitual en tres grandes categorías: Opiáceos/narcóticos/analgésicos, estimulantes y depresores. Algunas marcas de estas drogas son Vicodin, OxyContin, Percocet, Xanax, Valium y Adderall. El uso indebido de una droga afecta a la toma de decisiones y a la impulsividad, a la nutrición y al sueño, y hace que las personas corran más riesgo de sufrir traumas, violencia y lesiones. Sin embargo, el consumo de drogas no sólo afecta al individuo. Los amigos y las familias de los consumidores de drogas también se ven profundamente afectados.

Cómo afecta la adicción a la familia

La familia, los amigos, los compañeros de trabajo e incluso los vecinos pueden experimentar los efectos del abuso de drogas a través del consumidor. También afecta a la dinámica familiar. En el caso de que uno de los progenitores sea consumidor, a veces los hijos actúan como cónyuges sustitutos del progenitor limpio, viviendo en la negación de la adicción y tratando de ofrecer apoyo y asumir más responsabilidades de las que corresponden a su edad. Al igual que las víctimas de abusos, los hijos de los adictos suelen creer que la culpa de la adicción de su padre es suya y se sienten culpables. También pueden sentir que están haciendo algo ilegal al ser conscientes de las actividades ilegales de su progenitor. Los niños cuyos padres tienen un trastorno por consumo de sustancias corren un mayor riesgo de desarrollar su propio trastorno por consumo de sustancias a medida que crecen. Si las madres consumen mientras están embarazadas, sus hijos corren el riesgo de tener bajo peso al nacer, enfermedades de transmisión sexual y una amplia gama de defectos congénitos.

Incluso sin hijos de por medio, las parejas de alguien que consume drogas pueden enfrentarse a graves problemas tanto económicos como psicológicos. Se necesita dinero para conseguir drogas, y si el consumidor se queda sin ellas o no puede mantener un trabajo, puede depender de su pareja para alimentar la adicción. Dependiendo de la droga, el coste de la adicción puede superar el ingreso medio anual estadounidense de 61.937 dólares. Por ejemplo, una adicción a las pastillas OxyContin, tomadas tres veces al día, alcanza más de 70.000 dólares anuales.

Los problemas psicológicos pueden incluir ira, estrés, ansiedad, vergüenza, aislamiento, negación y protección del adicto. Las parejas de los adictos también pueden tener problemas de codependencia. Codependientes Anónimos ofrece apoyo a las personas que luchan por mantener relaciones sanas. Enumeran 5 patrones de codependencia: negación, baja autoestima, conformidad, control y patrones de evitación. Algunos de estos patrones se describen como:

• Mantener la lealtad a quienes no merecen su lealtad
• Controlar a los demás porque creen que los demás no pueden cuidar de sí mismos
• Tener una baja autoestima y negar sus propios sentimientos
• Comprometer sus valores para evitar el rechazo o el enfado de su pareja

Los adultos mayores son más propensos a que se les prescriban drogas debido a que tienen menos actividad y problemas de salud. Si un adulto mayor desarrolla un problema de drogas, sus hijos adultos suelen ser los que se hacen cargo de ellos económicamente. Cuando los hijos asumen el papel de cuidadores de sus padres, esto puede provocar sentimientos de vergüenza y estrés. A veces las familias creen que es necesario aislar al consumidor de la familia, pero esto puede empeorar la adicción. Por eso es importante que no sólo el consumidor de drogas reciba ayuda, sino también las familias de una organización como Nar-Anon.

¿Qué es Nar-Anon?

Nar-Anon es un programa de 12 pasos para ayudar a las personas con un amigo o familiar adicto. Nar-Anon no es un programa religioso, pero sí se centra en una forma de vida espiritual y en la ayuda de un Poder Superior según lo interpreta cada persona. Ofrecen una lista de 20 preguntas para determinar si el programa es adecuado para ti. Si respondes afirmativamente al menos a cuatro de las preguntas, Nar-Anon podría ayudarte. Algunas de las preguntas son:

• ¿Se le hace difícil creer en sus explicaciones?
• ¿Sus ahorros están desapareciendo misteriosamente?
• ¿Se está volviendo cada vez más reacio a invitar a sus amigos a su casa?
• ¿Es incapaz de hablar de la situación con amigos y parientes debido a la vergüenza?

Nar-Anon ofrece 12 pasos, 12 tradiciones y 12 conceptos de servicio. Los 12 pasos son casi idénticos a los 12 pasos de Narcóticos Anónimos, con la excepción de ligeros cambios de redacción cuando son aplicables, como cambiar «Admitimos que éramos impotentes ante nuestra adicción, que nuestras vidas se habían vuelto ingobernables» por «Admitimos que éramos impotentes ante el adicto, que nuestras vidas se habían vuelto ingobernables.» Los miembros pueden ofrecerse apoyo y consejo unos a otros e intentar ofrecer soluciones reales a los problemas a los que se enfrentan los amigos y familiares de los drogadictos.

Narateen

Narateen es un programa de 12 pasos para adolescentes que tienen un adicto en sus vidas. Cada grupo tiene dos facilitadores de Nar-Anon que han pasado una verificación de antecedentes, han sido verificados para su región y pueden guiar al grupo de adolescentes. Se ofrecen apoyo mutuo y aprenden mecanismos de afrontamiento. Las ubicaciones de las reuniones de Narateen se pueden encontrar en su sitio web.

Deja que Nar-Anon te ayude

No tienes que asumir solo el peso de vivir con un adicto. Nar-Anon reúne a personas que tienen las mismas experiencias y recuerda a los miembros que deben cuidarse a sí mismos antes de intentar cuidar a otra persona. Muchos consumidores de drogas tratan de ocultar su adicción a sus amigos y familiares durante el mayor tiempo posible. Si cree que un ser querido tiene una adicción, póngase en contacto con un proveedor de tratamiento bien informado para que le ayude a encontrar respuestas.