En telecomunicaciones, la tasa de llamadas perdidas (DCR) es la fracción de las llamadas telefónicas que, por razones técnicas, se cortaron antes de que los interlocutores terminaran su tono de conversación y antes de que uno de ellos colgara (llamadas perdidas). Esta fracción suele medirse como porcentaje de todas las llamadas. Un intento de llamada invoca un procedimiento de establecimiento de llamada que, si tiene éxito, da lugar a una llamada conectada. Una llamada conectada puede terminar (desconectarse) debido a una razón técnica antes de que las partes que realizan la llamada deseen hacerlo (en las llamadas telefónicas ordinarias esto significaría antes de que cualquiera de las partes haya colgado). Estas llamadas se clasifican como llamadas interrumpidas. En muchos casos prácticos, esta definición debe ampliarse con una serie de especificaciones detalladas que describen qué llamadas se cuentan exactamente como perdidas, en qué fase del procedimiento de establecimiento de la llamada se cuenta como conectada, etc. En los sistemas de telecomunicaciones modernos, como las redes celulares, el procedimiento de establecimiento de la llamada puede ser muy complejo y el punto en el que se considera que una llamada se ha conectado con éxito puede definirse de varias maneras, lo que influye en la forma de calcular el índice de llamadas perdidas. En los sistemas de comunicación móvil que utilizan canales de radio, la tasa de llamadas perdidas es más alta y puede oscilar, en el caso de las redes comerciales, entre el 0,1% y algunos porcentajes. Las principales razones de las llamadas perdidas en las redes móviles son la falta de cobertura radioeléctrica (tanto en el enlace descendente como en el ascendente), las interferencias radioeléctricas entre distintos abonados, las imperfecciones en el funcionamiento de la red (como los intentos fallidos de traspaso o de devolución de celda), la sobrecarga de los distintos elementos de la red (como las celdas), etc. La tasa de llamadas perdidas es uno de los indicadores clave de rendimiento (KPI) utilizados por los operadores de redes para evaluar el rendimiento de sus redes. Se supone que influye directamente en la satisfacción del cliente con el servicio prestado por la red y su operador. La tasa de llamadas perdidas suele incluirse, junto con otros parámetros técnicos de la red, en un indicador clave de rendimiento conocido como retención de llamadas.Los operadores de redes de telecomunicaciones pretenden reducir la tasa de llamadas perdidas en la medida en que sea práctico y asequible. En las redes móviles, esto se consigue mejorando la cobertura radioeléctrica, ampliando la capacidad de la red y optimizando el rendimiento de sus elementos, todo lo cual puede requerir un esfuerzo considerable e inversiones importantes por parte del operador de la red.