Huck dice: «Cuando estaba esperando a que sanara mi punción, usé una laringe artificial. Sólo tardé un par de días en aprender a hablar una vez que la punción estuvo lista»
Aprende a sustituir el papel que desempeñaba tu nariz. El aire que se respira a través de un estoma evita la nariz, que tiene varias funciones. Además de darte el sentido del olfato, la nariz hidrata y filtra el aire antes de que llegue a los pulmones. «Hay que aprender a proteger el estoma con filtros de estoma. Esto mantiene la humedad en los pulmones y filtra el polvo y los residuos», dice Witsil. También recomienda el uso de un humidificador en invierno y dice que hay técnicas que se pueden aprender durante la logopedia para ganar algo de olfato.
Proteger el estoma. La laringe normalmente protege las vías respiratorias de los alimentos o líquidos al tragar. Si tiene un estoma, debe tener cuidado de mantener el agua y las partículas pequeñas lejos de él. «Todo el mundo conoce la anécdota de una persona con estoma que se ahoga en la ducha. Aunque nunca he oído que ocurriera realmente, sí que pone de manifiesto la importancia de tener mucho cuidado al bañarse. Si tienes un estoma, algunos tipos de actividades, como la navegación o la pesca, pueden ser arriesgadas», señala Witsil. Además, con un estoma no puedes contener la respiración, así que evita esforzarte para levantar objetos pesados.
Únete a un grupo de apoyo. «Hay algunos grupos de apoyo excelentes para las personas que viven con un estoma. Deberías pensar en unirte a uno en persona o en línea. Siempre me sorprende lo bien que se adaptan las personas a vivir con un estoma», dice Witsil.
Aunque vivir con un estoma requiere acostumbrarse, Witsil dice a sus pacientes que sean positivos. «Mi consejo es que retomen sus aficiones y actividades laborales. La mayoría de las actividades pueden adaptarse a una persona con un estoma. Vivan la vida!», dice.
«Alguien que acaba de empezar tendrá que acostumbrarse, pero aún puede llevar una vida normal y productiva», añade Huck.